Por: Comunicación Corporativa
Los habitantes de los cantones de Los Santos, Aserrí, Desamparados, Acosta, Mora, Puriscal, El Guarco y el cantón Central de Cartago tendrán acceso, en los próximos meses, a la tecnología 5G, lo cual les permitirá disfrutar de las ventajas del internet móvil e inalámbrico, tanto en su vida diaria como para impulsar sus actividades económicas, especialmente en zonas rurales y de difícil acceso.
La iniciativa es posible gracias a la inversión realizada por la Cooperativa de Electrificación Rural Coopesantos R. L. (Coopesantos), tras adjudicarse el espectro radioeléctrico en banda baja para realizar el despliegue en comunidades rurales.
Se trata de un compromiso firme por seguir reduciendo la brecha digital y brindar progreso a territorios históricamente rezagados en conectividad.
La red 5G -quinta generación de tecnología móvil- ofrecerá a estos 10 cantones una conexión más rápida, confiable y versátil, con múltiples aplicaciones en áreas productivas, servicios públicos y desarrollo local.
“Lo que motivó a Coopesantos a participar en la licitación de la 5G fue poder llevar tecnología de avanzada a las comunidades rurales. Se trató de dotar de medios y plataformas a nuestros asociados para que tengan las mismas oportunidades que cualquier persona en un área urbana”, explicó Mario Patricio Solís, gerente general de la Cooperativa.
“Coopesantos busca la equidad”, agregó Solís, quien recordó que la Cooperativa comenzó a impulsar las redes inalámbricas durante la pandemia, lo que contribuyó a que las familias siguieran estudiando y trabajando.
“La infraestructura consiste en la instalación de radiobases con repetidoras distribuidas en toda la región. En una primera etapa, desplegaremos 90 de estas estructuras. Aunque el proyecto tiene un plazo aproximado de seis años, desde el primer año debemos garantizar presencia en los 10 cantones. Para lograrlo, instalaremos torres y aprovecharemos, además, la infraestructura existente para irradiar con señal inalámbrica a todas las comunidades”, explicó el ingeniero Johnny Quesada, director de Infocomunicaciones de Coopesantos.
Pablo Badilla Mora, presidente de la Asada Los Monge, en Chirraca de Acosta, enfatizó que, cuando se instale la 5G, estarán en capacidad de incorporar medidores inteligentes que agilizarán la medición, así como sistemas automatizados en los tanques, que posibilitará abrir o cerrar válvulas en función de las condiciones climáticas. Todo esto podrá controlarse en forma remota mediante tecnología, incluso en lugares de difícil acceso.
En comunidades como Providencia de Dota, ubicada a 27 kilómetros del centro de ese cantón y con alta visitación de turistas nacionales e internacionales, el internet fijo inalámbrico fortalecerá la economía local y los emprendimientos turísticos.
En Sabanillas y Teruel de Acosta, localizadas a 20 kilómetros de San Ignacio y dedicadas principalmente al cultivo de cítricos, la conectividad facilitará la tecnificación agrícola y el acceso a plataformas digitales de comercialización.
Este tipo de soluciones también beneficiará a la misma Cooperativa en su esfuerzo por fortalecer las redes eléctricas inteligentes, especialmente en sitios alejados.
En la zona cafetalera de Los Santos, los productores podrán contar con estaciones de monitoreo agrícola conectadas a internet, capaces de transmitir en tiempo real variables del clima, del suelo y otros factores relevantes para la productividad.
Actualmente, Coopesantos está a la espera del refrendo del convenio por parte de la Contraloría General de la República. Una vez aprobado, se estima que en un plazo no mayor de 12 meses la tecnología entrará en funcionamiento en los cantones mencionados.
“La red 5G para las empresas de agronegocios beneficia mucho a la agricultura de precisión, que busca ahorrar insumos y mejorar la calidad de los productos, en este caso los cítricos. Por ejemplo, sensores del suelo y de lluvia, drones de aplicación que podrían utilizarse de manera más sencilla o sistemas para hacer el inventario de cítricos o árboles. Podemos monitorear los cultivos a larga distancia por medio de cámaras de vigilancia y realizar de forma remota la revisión de los cultivos y saber cuándo cosechar o cuándo aplicar abonos”, detalló Danilo Mata Quesada, de la empresa Calamondines de Costa Rica, en San Ignacio de Acosta.
Este esfuerzo se alinea con el propósito de Coopesantos de garantizar a las comunidades rurales el acceso a herramientas tecnológicas que promuevan bienestar, desarrollo sostenible y oportunidades en igualdad de condiciones.